El 17 de febrero de 1621, el capitán Pedro Gutiérrez de Lugo y el padre Gabriel de Mendoza fundaron el pueblo Dulce Nombre de Jesús de Petare, sobre una pequeña colina rodeada por la quebrada El Oro y los ríos Caurimare y Guaire.
El vocablo Petare deriva de la lengua caribe cuyo significado es “De cara al río” (Pet: cara - Are: río).
Los Mariches, grupo indígena perteneciente a la familia lingüística Caribe, fueron los primeros habitantes de estas tierras hasta 1573, cuando su principal cacique Tamanaco, murió a manos del conquistador español Pedro Alonso Galeos. Los colonizadores construyeron la villa siguiendo la forma reticular de la plaza central, ubicando alrededor los edificios más emblemáticos como: la iglesia, el poder público, el mercado y las viviendas de las familias más notables (Fig 1).
Entre 1621 y 1886, Petare y sus alrededores era un territorio eminentemente agrícola. Con la llegada de los canarios de La Candelaria a inicio del siglo XVIII, quiénes fueron determinantes en la consolidación de la actividad agrícola y en el desarrollo de nuevas rutas de comercio. Petare se convirtió en un área estratégica y una parada obligada para todos los que iban en dirección al valle de Caracas desde Oriente o los Valles del Tuy.
Durante este período Petare destacó por la producción de azúcar, cacao, tabaco, pieles y añil, tanto para el consumo interno como para la exportación. Por esta razón, la Compañía Gran Ferrocarril de Venezuela construyó el tramo de rieles desde Caracas hacia Petare, que se inauguró el 4 de septiembre de 1886, y que tenía su terminal en la calle Las Tunitas (Fig 2).
En 1880 se construyó un acueducto y entró en funcionamiento el telégrafo, el cual permitió las comunicaciones con el resto del país.
La fertilidad del suelo y el agradable clima atrajeron a destacadas personalidades caraqueñas como Andrés Bello, José Félix Ribas, José Antonio Rodríguez Domínguez, Manuel de Clemente y Francisco de Berroterán (marqués del Valle de Santiago), quiénes formaron parte del selecto grupo de huéspedes que adquirieron propiedades para el cultivo y el descanso.
En 1897, Petare fue el primer pueblo del valle capitalino que disfrutó de la luz eléctrica, gracias a su cercanía con la planta eléctrica de El Encantado.
El bienestar y desarrollo económico de la villa se dio gracias a las labores del campo, que constituyeron el sostén de la comunidad hasta mediados del siglo XX. A finales de ese siglo se contabilizaban unas 115 haciendas de café, 15 trapiches y otras muchas siembras de maíz y legumbres, además de parcelas para la cría de ganado, gallinas y cerdos. Este auge productivo impulsó el desarrollo vial de la ciudad y sus alrededores. Es el caso de la construcción de la carretera del Este que iniciaba su trayecto en Caracas rumbo a Petare, Guarenas, Guatire y luego a Barlovento, la cual fue inagurada en mayo de 1874 (Fig 3).
A mediados del Siglo XX, se realizó el primer cambio importante en la estructura de Petare debido a la construcción de la avenida Francisco de Miranda, el edificio Battaglia, el Hospital de Emergencias Ana Francisca Pérez de León, la Escuela Municipal José de Jesús Arocha y los bloques de La Vega, todas obras realizadas durante la dictadura del general Marcos Pérez Jiménez.
Luego, durante la era democrática, vinieron más transformaciones profundas en servicios públicos como: el transporte, educación, salud, electricidad y agua, todos fueron ampliados y mejorados para el beneficio de la colectividad.
El presidente Rómulo Betancourt construyó la urbanización La Urbina, en los terrenos que estaban invadidos y donde existían caseríos que habían cubierto la antigua Hacienda La Urbina. La era petrolera impulsó un violento proceso de crecimiento urbano, que propició la sustitución de las extensas plantaciones por modernas urbanizaciones, zonas industriales y populares barriadas (Fig 4).
Durante las últimas dos décadas, Petare y el municipio Sucre en general, han experimentado el acelerado crecimiento de los sectores populares que se aprecia, principalmente, en la carretera Petare-Santa Lucía y Caucagüita, así como hacia las laderas del Parque Nacional Waraira Repano. La alta densidad de población en los sectores populares ha generado altos volúmenes de circulación vehicular y peatonal, razón por la que el Gobierno Bolivariano construyó nuevos sistemas de transporte masivo como el Cabletren de Petare y el MetroCable de Mariches, así como soluciones viales para descongestionar los alrededores de la popular redoma de Petare (Fig 5).
La evolución política de Petare se dio como consecuencia de los ajustes administrativos que el Gobierno de la Gran Colombia y luego de la República de Venezuela realizaron en el país para ir ordenando la gestión política en el territorio. Esto ocurrió con mayor énfasis entre el siglo XIX y se terminó de consolidar en el siglo XX.
Al momento de su fundación, Petare es nombrado Pueblo de Doctrina de Indios debido a que sus tierras fueron ocupadas por indígenas antes de la llegada de los españoles, luego pasó a ser Corregimiento y posteriormente cambia su estatus a Cantón según la Ley del 2 de octubre de 1821, donde el artículo 42 estableció la formación de su primer Cabildo. Esta Ley subdividió en siete departamentos el territorio de la Gran Colombia.
La prosperidad económica de Petare y la interconexión que permitían sus caminos con el oriente y los Valles del Tuy ayudaron a elevar su nivel político y es así como en 1863 pasa a ser la capital del Distrito Urbaneja, para luego convertirse en la capital del Estado Soberano de Bolívar en 1872. Este estado comprendía lo que es hoy el estado Miranda. Desde entonces, Petare mantiene el estatus de capital hasta nuestros días.
Durante las modificaciones que se realizaron a la Constitución de la República, los estados se ampliaban o reducían y la división territorial cambiaba de nombre, es por ello que en 1904 Petare pasa a ser la capital del Departamento Sucre del estado Miranda debido a que, en la modificación de la Constitución de 1901, se crea el estado Miranda de la Sección Oriental del Distrito Federal. Luego, en 1911 este estado se separa de la administración del Distrito Federal y Petare pasa a ser su capital.
Petare mantuvo su estatus de capital de Distrito hasta el año 1999 cuando la aprobación de la nueva Constitución cambió el ordenamiento político administrativo de Venezuela. Desde entonces, Petare se mantiene como la capital del municipio Sucre, constituido por cinco parroquias: Leoncio Martínez, Petare, La Dolorita, Caucagüita y Fila de Mariches; perteneciente al Estado Bolivariano de Miranda.